Vi un prompt y se me cayeron los huevos al suelo.

Lo publicó la gente de Offlesson. No me lo inventé yo (aunque me encantaría).
Y era tan bueno, tan visual, tan claro, que me dieron ganas de dejar todo lo que estaba haciendo y ponerme a crear.

Decía algo así:

“Cree una imagen hiperrealista de alta resolución de un objeto sellado dentro de una bolsa metálica o de plástico transparente arrugada y envasada al vacío. El envoltorio debe ajustarse perfectamente a la forma del objeto, exagerando sus curvas, bordes y textura como si estuviera succionado…”

Y seguía, con más detalles, más precisión, más intención.

¿Sabes qué pensé?

Esto no es solo una instrucción. Es una escena. Una historia. Un universo.

Un buen prompt no es “escríbeme un logo bonito”.
Es saber transmitir una idea con tanta fuerza que la IA no tiene otra opción que darte oro.

Y ahí es donde está la diferencia.

Porque muchos están acojonados con la IA.
Creen que nos va a reemplazar. Que se va a comer todo.
Que ya no hace falta un creativo, un diseñador, un fotógrafo, un filmmaker…

Mentira.

La IA no va a reemplazar a los que tienen ideas.
Va a reemplazar a los que no aportan nada.

Porque una máquina, por muy lista que sea, no sabe mirar como tú.
No sabe sentir como tú.
Y no sabe contar como tú si no le das algo con alma para que funcione.

La clave no está en pelearte con la IA.
La clave está en usarla como un amplificador brutal de tu creatividad.
Como una herramienta para ir más lejos, más rápido y con más intención.

Gracias Offlesson por ese chute de inspiración.
No lo escondo. No lo copio.
Lo aplaudo. Y lo uso para seguir afilando mi manera de crear.

Porque al final, en este juego, solo sobreviven los que tienen algo que decir.
Y los que saben cómo decirlo.

Si te interesa tener todo el Prompt para ChatGPT tienes dos opciones:

• O vas a Offlesson a buscarlo, que es totalmente razonable

• O me mandas un correo y te lo mando